Este ultimo sábado mi dueña se reunió con sus amigas en la casa de una de ellas donde estuvo hasta altas horas de la noche charlando y divirtiéndose, todo eso estimulado con el consumo de vinos de muy alta calidad.
Era su deseo que yo me quede en la casa aguardando su llegada y matando el tiempo con las tareas domesticas. Yo a eso ya me estoy acostumbrando y no me parece fuera de lo común, es mas ya le doy la razón cuando dice “un esclavo no tiene que salir a divertirse, para que conserves tu mentalidad sumisa tenés que quedarte en la casa.”
Además se que ella disfruta mucho el contraste de salir, gastar dinero, estar en los lujos mientras sus esclavos se la pasan con restricciones, esperando por ella. Esa situación la hace sentir una reina y me alegro cuando se siente así.
Al llegar me comento divertida, lo bien que la paso, lo buena que había estado la cena, y como había disfrutado de saborear un buen vino acompañada de amigas, mientras controlaba que toda la casa este en orden como ella lo había indicado.
Al acostarnos mi Ama me dijo que le daba lastima no haber acordado con nadie para terminar tan buena noche con un buen rato de sexo con algún amante.
El domingo nos vimos muy poco por varias razones, y al final de la cena vino uno de los momentos mas lindos que pase en estos últimos meses.
Cuando recogía la mesa mi Reina me hizo arrodillar ante ella, y me digo que le acaricie sus hermosas piernas.
Ya ahí estaba súper babeado, porque soy fanático de sus piernas. Boquiabierto subí mi mano hacia su entrepierna, y para mi sorpresa y alegría, ella comenzó a contraerse de placer y no daba muestras de querer que yo pare, todo esto indicaba de qué queria guerra y el único representante a mano del género masculino era yo. No se imaginan la felicidad que sentí al darme cuenta de cómo terminaría todo.
Esta vez me tocaba a mí!!!, en seguida se recostó en el sillón y me indico que le lamiera su deseada vagina. Ese es mi deporte preferido!! Estaría horas y horas en ese lugar.
Mi Dueña se contraía del placer y sus gemidos aumentaban de intensidad con cada orgasmo que le provocaba.
Bastante tiempo después me separa y me deja arrodillado en el suelo, se para ante mi y me dice “ahora voy a usar eso que tenés ahí, pero quiero que te quede claro que es porque sos el ultimo recurso y estoy muy necesitada, eso de tener sexo con esclavos no me gusta mucho pero menos me gusta estar en castidad”. No podía faltar claro está, alguna frase humillante para que no me agrande tanto.
Después se sentó sobre mi, y comenzó a cabalgarme como si fuera yo una silla, yo seguí arrodillado y las rodillas ya las empezaba a sentir, pero nada se comparaba con el inmenso placer que estaba sintiendo en ese momento.
La dicha que sentía al ver ese espectacular cuerpo desnudo solo para mi era inmensa, cuando mi ama se aburrió de la posición me indicó que lo hagamos a cuatro patas.
Wow!! Hace cuanto que no lo hacia de esa forma, igual mi reina me dijo que se estaba imaginando de que yo era un amante y que imaginaba a su cornudo esclavo (o sea yo) de rodillas mirando y sufriendo por su Ama.
Igual nada disminuyo mi placer que llego a su punto máximo cuando ella me dio permiso para acabar.
Yo quede momentáneamente extenuado, pero lo curioso es que mi Reina seguía con ganas, a pesar de sus múltiples orgasmos.
Así que me pido que le alcance su vibrador, y me dijo que no me esperance con una segunda vuelta que eso ya seria demasiado lujo para mi.
Y es así como yo me fui a lavar los platos mientras ella seguía gimiendo, pero esta vez con su vibrador.
De todas maneras ayer me sentí un Rey y todo fue gracias a ella. Todavía hoy tengo esas hermosas imágenes pegadas en mi retina.
Gracias Reina!!
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